El encuentro del próximo 14 de mayo será la reedición de la pasada final de la Copa de la Liga, en la que los de Jürgen Klopp se impusieron en la tanda de penaltis.

En la semifinal de este domingo, después de que el sábado el Liverpool eliminara al Manchester City, el Chelsea se impuso al Palace en un encuentro somnífero en Wembley. El ritmo fue lento, debido en gran parte al desgaste físico del duelo de Champions League contra el Real Madrid entre semana, y el Palace se conformó con esperar, por lo que las ocasiones brillaron por su ausencia.

Thomas Tuchel, que hizo tres cambios respecto al equipo que venció al Real Madrid, perdió a Mateo Kovacic por lesión a los 25 minutos y utilizó a César Azpilicueta como lateral derecho, mandando a Reece James al centro de la defensa.

El partido se mantuvo inamovible, con apenas un paradón de Edouard Mendy a Kouyaté en los primeros 45 minutos, hasta que Loftus-Cheek rompió el cerrojo con una gran volea desde dentro del área. La pelota quedó muerta, tras un centro tapado a Kai Havertz, y el centrocampista inglés la empaló con la ayuda de Andersen, que toco lo justo para cambiarle la trayectoria a Jack Butland.

No cambió mucho su plan de juego el Palace con el 1-0, pero sí empezó a defender peor y con una facilidad pasmosa, Timo Werner le entregó el segundo a Mason Mount, que se metió hasta la cocina y definió delante de Butland.

El Chelsea aspirará el 14 de mayo a su novena FA Cup, la primera desde la de la temporada 2017/2018 en la que levantaron el título gracias a un tanto de Eden Hazard. En caso de ganar, el Chelsea se colocará como el tercer equipo con más títulos en esta competición, solo por detrás de Arsenal (14) y Manchester United (12). Si lo ganara el Liverpool, los ‘Reds’ empatarán a ocho trofeos a Tottenham y Chelsea.