Pero el partido fue más que especial para Dani Alves, quien vivió una fiesta de cariño de principio a fin en el Camp Nou.

Desde que salió a calentar enfundado con la ropa del conjunto mexicano, el brasileño recibió ovación por parte del respetable catalán. De hecho, antes de iniciar la batalla, el otrora lateral derecho blaugrana recibió muestras afectivas y de agradecimiento, tal como una camiseta con el número de partidos que registró como Culé (431).

Pero lo más emotivo de la noche en la Ciudad Condal fue cuando Alves fue cargado por sus compañeros y lanzado ‘al aire’ para ser ‘cachado’ por la plantilla, incluido Xavi, su excompañero y hoy técnico del Barça.

Dicho momento fue acompañado por aplausos del público, que también se entregó cuando el capitán Sergio Busquets invitó a Dani a levantar el trofeo conquistado ante el cuadro auriazul, al cual se debe profesionalmente el amazónico.

Alves se despidió como un ídolo del Camp Nou, donde vivió su mejor etapa futbolística y donde labró gran parte de los títulos que lo han convertido en el futbolista más ganador de la historia (22 de 43). “Te amamos, Dani“, tuiteó el Futbol Club Barcelona desde su cuenta.