Pues más allá de la negativa de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) que encabeza Ana Guevara, para respaldar económicamente a los seleccionados mexicanos que participarán en la justa, la número uno del mundo no pone pretextos para buscar la cima una vez más.

“El compromiso está ahí, de poner y seguir poniendo a México en lo más alto del podio, siempre ha sido uno de mis grandes trabajos y labores, por lo que entreno, por lo que me preparo, por lo que decidí dedicarme al raquetbol.

“Estoy muy emocionada y contenta de que seamos anfitriones en uno de los eventos más importantes de mi deporte, los mundiales son cada dos años y el que sea en casa me llena de orgullo, el escenario está ahí para que luzca mi deporte”, dijo Paola en entrevista con Imagen Deportes.

Será la edición 21 del Mundial y la tercera ocasión que se celebra en San Luis Potosí, en donde se reunirán más de 200 raquetbolistas de 15 países.

Longoria confesó que le llena de orgullo ser referente e inspiración para que cada vez más el raquetbol se practique en México, y deseó dejar un legado cuando decida poner fin a una carrera histórica.

“Este deporte me ha dado grandes satisfacciones y en lo personal gritarle al mundo que hay una mexicana liderando el ranking profesional en un deporte que era dominado por norteamericanas y canadienses.

“Y bueno, el parteaguas de que Paola Longoria esté en la cima del ranking (ha provocado) que hay muchas mexicanas que están dentro del top 15 y ya la número dos es otra mexicana y para mí es una gran satisfacción y esperemos que el día de mañana, aunque ojalá que falten unos cuantos años, que decida retirarme, pues tengamos una gran generación en el raquetbol”, añadió en la entrevista referida.