Que fue muy problemática para Red Bull, con el héroe local Max Verstappen con un presunto problema de transmisión que lo obligó a parar, y un susto tremendo para Checo Pérez, quien estuvo cerca de impactarse con la barrera de protección.

El ritmo de Mercedes fue una declaración de intenciones, ya que Russell registró un tiempo de 1 minuto y 12.455 segundos para terminar a 0.240 segundos de Hamilton en la pista de 4 km de Zandvoort, con Carlos Sainz de Ferrari una décima de segundo más atrás en tercer lugar.

El líder del campeonato, Verstappen, que triunfó en casa el año pasado, marcó la vuelta más rápida con los neumáticos duros, pero luego redujo drásticamente la velocidad antes de finalmente detener el auto.

La sesión marcó bandera roja con 45 minutos para el final, cuando su auto dañado fue retirado de la pista, con Verstappen, quien saludó a la multitud en su camino de regreso a boxes, fuera de la práctica.

Su compañero de equipo en Red Bull, Checo Pérez, tuvo una sesión desafiante en Holanda, que incluyó correr de par en par en la curva 9 y esquivar por poco la barrera de protección antes de reincorporarse, dando un gran susto a los aficionados. Fue el séptimo más rápido en general.