Al caer de manera sorpresiva 1-0 ante el Al-Ahly en la segunda ronda del torneo, por lo que su único consuelo será buscar el quinto lugar. Un auténtico fracaso.

Un gol de Mohamed Hany en el minuto 53 decidió el encuentro en el que el club mexicano, uno de los más poderosos económicamente, dio una pobre exhibición, sin idea ni capacidad para al menos lograr un empate.

El Al-Ahly jugó mermado, al tener cinco jugadores concentrados con la selección de Egipto, pero el campeón africano hizo el único gol y avanzó a las semifinales, en las que se enfrentará al Palmeiras brasileño, monarca de la Conmebol.

Rayados, representantes de la Concacaf, dominaron el primer tiempo con el 63 por ciento de la posesión, pero el Al-Ahly tuvo las jugadas ofensivas más claras al aprovechar contragolpes.

En el minuto 3, Ahmed Abdelkader firmó un remate en el área que detuvo el argentino Esteban Andrada, guardameta del Monterrey, quien en el 28 volvió a salvar su marco tras un zurdazo de Taher Mohamed.

MUCHAS FALLAS

Los Rayados se cansaron de fallar tiros durante el primer tiempo. Rogelio Funes Mori tuvo dos desde la media luna, primero en el minuto 2 y luego en el 19, que pasaron cerca de un poste.

El equipo egipcio se mostró más peligroso en los primeros minutos de la segunda mitad y en el 53 se pusieron por delante cuando un centro por la izquierda de Ali Maâloul provocó que Andrada rechazara el balón y permitiera a Mohamed Hany, con la pierna derecha, convertir el 1-0.

Quedaba mucho partido por delante, pero el equipo egipcio contrarrestó todos los intentos ofensivos del Monterrey, que, salvo un cabezazo de Meza en el minuto 55 que atajó Lofty, no volvió a incomodar al Al-Ahly.

Rayados solo puede evitar un peor ridículo en el juego por el quinto lugar del Mundial de Clubes, aunque será muy poco consuelo para el equipo mexicano.