EFE.- Los pilotos que disputan el Mundial de Fórmula Uno estuvieron reunidos hasta pasadas las dos de la mañana del sábado para ver si disputaban o no el Gran Premio de Arabia Saudita de Fórmula Uno después del atentado con misiles que sufrió una instalación petrolera en las proximidades -a unos 15 kilómetros- del circuito de Jeddah, sede de la segunda prueba del campeonato; antes de confirmarse que sí lo harían.

Después de que el italiano Stefano Domenicali, máximo dirigente de la F1, aseguró que el Gran Premio se iba a disputar tal y como “estaba previsto”, los pilotos y los directores de escudería estuvieron reunidos durante más de dos horas en el circuito de Jeddah.

Una vez que los jefes de equipo abandonaron el recinto en el que todos estaban reunidos, los pilotos siguieron debatiendo hasta pasadas las dos de la mañana del sábado para ver si seguían en Arabia o si, por contra, se plantaban y no disputaban el Gran Premio.

El dueño de la escudería McLaren, el estadounidense Zak Brown, adelantó a ‘As’ que el Gran Premio se disputaría; ya que finalmente, los pilotos decidieron que así fuera, según informó desde Jeddah el citado diario deportivo madrileño. 

Ahora hay reunión de jefes de equipo, pilotos, con FIA, F1 y autoridades locales sobre la seguridad del GP.