El cual calificó como “brillante”, pese a que este domingo terminó en cuarto lugar tras no poder refrendar por diversas circunstancias la pole position que consiguió en la clasificación del sábado.

“Ha conducido brillantemente todo el fin de semana. Se va a llevar mucha confianza este fin de semana. Tiene el ritmo y simplemente tuvo mala suerte con la posición en la pista”, declaró.

El directivo se refirió a que Checo perdió la oportunidad de mantenerse en la primera posición debido a un safety car en el que estuvo involucrado Nicholas Latifi, quien chocó contra el muro, lo que provocó que se detuviera la carrera, lo cual le dio ventaja a los demás pilotos.

“Hizo todo el trabajo duro al comienzo de la carrera como para que el safety car saliera en el momento equivocado”, juzgó Horner.

Finalmente, Horner se refirió a la nueva rivalidad que ahora tiene Red Bull con Ferrari, luego de que en una gran batalla hasta las últimas vueltas, este domingo Max Verstappen se impusiera al monegasco Charles Leclerc, quien ganó hace ocho días en el Gran Premio de Baréin.

“Es una nueva rivalidad. Mercedes es al menos medio segundo demasiado lento en este momento, pero quién sabe, es posible que puedan resolver sus problemas. Pero nosotros tampoco dormimos.

“Trabajamos duro para seguir desarrollando el coche. Creo que es más bonito pelear con Charles (Leclerc) y Ferrari que con Mercedes. Ahora es más a nivel deportivo. Sé que solo hemos tenido dos carreras, pero no creo que se intensifique como con Mercedes.

“Ese DRS (Drag Reduction System, por sus siglas en inglés, que es el alerón trasero móvil) es tan poderoso en la recta. Se podía ver que ninguno de los pilotos quería conseguirlo. ¡Qué gran carrera! Fueron unas últimas vueltas emocionantes, pero tuvimos suficiente ritmo para traer el triunfo”, puntualizó.