El proyecto presentado por la diputada priista Rocío García Olmedo tuvo el apoyo de las bancadas de Morena, Encuentro Social y Partido del Trabajo, lo que le bastó para ser aprobada por mayoría.

En contra votaron sus compañeros del PRI Nibardo Hernández Sánchez, Javier Casique Zárate y Josefina García Hernández, además de los legisladores de Nueva Alianza, PVEM, Compromiso por Puebla, PAN, Movimiento Ciudadano y PRD.

La reforma quedó de la siguiente manera: “habrá una notaría pública por cada 50 mil habitantes de la población económicamente activa por distrito judicial, de conformidad con los censos realizados por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, proyectados según el Consejo Nacional de Población o el organismo similar que oficialmente realice dichas funciones. En consecuencia, el Ejecutivo podrá crear y distribuir el número de notarías que se requiera, de acuerdo con lo establecido en esta ley”.

Los cambios aplicarán en las siguientes administraciones estatales, toda vez que en la actual ya inició el proceso para dar notarías en Oriental, San Martín Texmelucan, Cuautlancingo, Ocoyucan y Atlixco.